Análisis Etapa 4: Aventura en África

 ETAPA 4.

El comienzo de la cuarta etapa de Pekín Express fue, para mi gusto, muy muy lento. Nada más iniciar la etapa se les informa a los concursantes que tendrán que llegar a un destino donde hallarán y recogerán, según el orden de llegada, un botiquín (pasar lo noche en una barrio pobre de Kenia, pero salir con 20 minutos de ventaja al día siguiente) o una botella de vino (pasar la noche con todas las comodidades en Runda: una de los barrios más exclusivos de Kenia).

A priori los concursantes parecían estar plenamente de acuerdo en ir a por los botiquines. Finalmente no fue así y muchos prefirieron pasarse la noche en una buena cama llenos de comodidades. Javi y Santi fueron los últimos en llegar a este punto. ¡Qué cabrones! – Lo único que quedaba que no se había llevado ya el resto de los compañeros era un botiquín. Aquel objeto por el que se suponía que “todos/ casi todos” iban a luchar.

Algunos como las sevillanas sí que mostraron duda a la hora de ir a por el botiquín, y casi desde un primer instante mostraron intención de ir a por el vino. Padre e hijo que querían pasar noche cómoda, sobre todo por Santiago, se tuvieron que conformar con dormir en un humilde lugar.

Personalmente si yo fuera concursante de Pekín Express me hubiera decantado sin duda alguna por el vino. ¿Por qué? Muy simple, en primer lugar me suele mosquear que usa opción sea tan apetecible en comparación con la otra (los 20 minutos de ventaja); en segundo lugar reponer fuerzas y adecentarse nunca viene mal, 3º puede que eligiendo el botiquín tuvieras “ventaja de 20 minutos” pero ¿Sería fácil conseguir coche en el barrio chabolista? A mí al menos lo que me viene a la cabeza es un barrio con pocos medios y alejado donde Dios perdió el mechero y 4º; decantándose uno por el barrio rico tendría más oportunidades a priori de conseguir vehículo o de que incluso los dueños de las casas donde te alojaban te pagaran el transporte… consiguiendo así hacer que los 20 minutos de ventaja fueran una nimiedad. Eso claro está, pensando en la carrera y no en la experiencia vivida.

La noche fue muy variopinta. Lo más destacable de la zona de ricos fue que Jota se quería “trabajar” a la que le alojaba (porque estaban contratados por la organización, que si no creo yo que lo hubieran puesto junto a su compañero en la calle por lo de la confesión de que hizo porno). El sector rico nos mostró por lo general unos “host” muy amables (por ejemplo la mujer que acogió a Pedro y a Inés) con los concursantes, a parte alguna que otra capitalista. Mientras, en el barrio de chabolas: Javi y Santi parecían unir más sus lazos de padre e hijo, las hermanas Mar y Vanesa se hacían peinados del lugar;  Chinto y Pablo se divertían en un colegio; David y Cuqui ayudan a “su familia” con el agua…  Cae el sol y arranca un nuevo día de etapa.

Como mencioné con anterioridad se pegaron casi una hora, hora y cuarto solo para emitir las imágenes de la noche que pasaron tanto en el barrio exclusivo como en el chabolista. No es que estuviera mal, pero carrera se vio menos la verdad. Para mí fue demasiado tiempo invertido para algo que por lo general no ocupa ni 10-15 minutos.

Los del barrio chabolista hacen su derecho de salir 20 minutos antes que el resto. Buscan transporte juntos y comienza la polémica de esta etapa. En el transporte parecen quedar de acuerdo en que se hará una parada ya que van con suficiente tiempo para comprar algo de comida. Hacen que el conductor pare y buscan el supermercado. Las hermanas esperan en el coche hasta que no pueden aguantar más,  consideran que estar allí tanto tiempo paradas hará que incluso los otros les adelanten. La idea más motivada/alimentada por una de las hermanas hace que mar y Vanesa sin previo aviso se dirijan a buscar coche. Los otros las ven y muestran algo de resignación. Las parejas formadas por Santi-Javi, Chinto-Pablo y David- Cuqui apresuran y les siguen el paso. Eso sí, no sin parar de comentar la “jugada” de las hermanas, la cual muchos consideraban desleal. Por poco, pero las hermanas son las primeras en jugar por la lucha a la inmunidad seguidas de David y Cuqui quienes hablan con ellas y parecen “arreglar” el “malentendido”.

Mi opinión sobre el tema es la de un mero espectador puesto que no sé quién aporta comida cuando los concursantes se tienen que reunir en el campamento. Como jugada y parte de la carrera la estrategia de no parar y seguir avanzando me parece más que correcta. Lo que fallaron fueron las formas. Fue un poco golpe bajo irse sin decir nada, sin mediar palabra. Yo entiendo que no quisieran parar puesto que al fin y al cabo es una carrera. Pero de antemano se lo podían haber comunicado a los compañeros; un simple “chicos nosotras vamos a continuar” hubiera quedado como buen gesto y quizás, pudiera haberles evitado un problema de cara a futuras etapas. El irse sin más a otro coche fue una acción bastante fea y desconsiderada. Si ellas aportan generalmente comida o no, si paran a comprar o no, lo desconozco igual que ustedes. Yo creo que desde que tengan la ocasión se lo echaran en cara.

Comienza el juego de inmunidad entre las hermanas y David y Cuqui. El juego fue bastante divertido recogiendo pasajeros hasta el destino indicado. Mediante la acumulación de puntos por la “venta” de tickets, Mar y Vanesa se hicieron con la preciada inmunidad.

Ser inmunes tenia esta vez regalo. Antes de llegar a la meta final de etapa los concursantes tenían que aprenderse unas oraciones en el idioma de diversas tribus de Kenia, tribus que eran más o menos comunes y que esto suponía un mayor o menor grado de dificultad para encontrar a miembros de la misma. Las inmunes se encargaron de repartir los regalitos al resto de compañeros, a Chimo y Vane le dieron el peor de los regalos, la tribu menos numerosa y cuyo miembro se suponía como el más difícil de encontrar: un masai.

Todos apuraron a dirigirse a donde un miembro de dichas tribus les enseñarían a decir. “¿Es usted de X tribu? ¿Podría venir conmigo hasta la bandera?” Tras discusiones por el camino: Jota y Freire (básicamente por el idioma), David y Cuqui (porque no dejó a ella memorizar)… los concursantes llegaron a la meta con las frases aprendidas y buscaron a miembros de sus tribus. Menciono que a Sara y María no se las vio mucho en esta etapa, ni escribí el nombre de ellas durante este comentario siendo en etapas anteriores de las más competitivas.

Sinceramente la prueba me pareció un churro como un truño. Tanto rollo con memorizar, pero finalmente se vio que muchos concursantes se valieron más de inglés para buscar a X miembro que de las frases aprendidas (a veces no utilizadas, o  a veces inteligibles). El repetir el mensaje en inglés quitaba bastante sentido a la prueba. Ni comentar la veracidad de los que se hacían llamar de esa tribu. Creo que lo de Vane y Chimo fue una pequeña putada por el hecho de que el señor confesara de que era solamente medio masai, fue quizás demasiado honesto. Apuesto a que muchos de otras tribus simplemente asintiendo pasaron la prueba sin ser realmente o totalmente de la tribu que decían ser.

Momento de ranking. Chinto y Pablo se alzan con el cuarto amuleto de Aventura en África. Javi y Santi llegan los últimos viéndose bastante afectados por la prueba de las tribus y esperan el veredicto del sobre. ¡Sobre verde! (ya tocaba por cierto ¬¬) Tendrán hándicap pero seguirán al menos otra etapa más en Pekín Express. Eso es todo por ahora, ¡hasta el próximo domingo!